El Museo de
Arquitectura, reconociendo a quienes por sus cualidades éticas, morales y
por sus saberes, le dieron invalorables aportes al país, continúa
divulgando notas sobre sus vidas. Esta vez se trata de Celso Fortoul.
Extraordinaria
y llana persona que conjugaba la ética y el talento con un humor inteligente y
sencilla jovialidad. De contagiante y estimulante entusiasmo y solidaridad. Y
hasta amante de la ópera, es una referencia
de honestidad y compromiso social. Qué tal si se creara una base
bibliográfica de quienes fueron grandes hombres y mujeres pero que por humildad
y modestia, estuvieron al margen de la figuración y de las “fotos”. Honor a
Celso Fortoul y su orientador ejemplo
para las actuales y nuevas generaciones.
Para recordarlo,
hemos rescatado una reseña elaborada hace años por el Ing. JC Parisca (+) y
dos recién solicitadas especialmente al Ing. OA López y a la Arq. Teresa
Guevara. Quienes en diferentes momentos tuvieron experiencias relevantes junto
a C Fortoul y nos las cuentan a continuación.
Juan Carlos Parisca (1939-2017)
Celso Fortoul Padrón,
ingeniero estructural, pionero creador de técnicas propias para la
aplicación de la informática al cálculo de edificios, excelente profesor y
mejor persona. Quienes tuvimos la suerte de ser su alumno y compañero de
trabajo tenemos mucho que celebrar. No dejamos de recordar su talento de orador
y su memoria torrencial, que lo convertían en el candidato fijo para el
discurso de orden en toda reunión social o profesional y hasta política.
Recuerdo haberlo oído recitar de memoria un larguísimo fragmento de Hojas de
Hierba, el poema de W. Whitman. Su condición humana más que otra cosa,
lo llevó a participar en el acto de fundación del MIR, allá por 1960.
Oscar Andrés López (Caracas 01 de marzo de 2022)
Celso Fortoul, el Profesor
Celso Fortoul estudia en la Universidad Central de
Venezuela y se gradúa de ingeniero civil en el año 1948. Comienza a trabajar en
la Sala de Cálculo de la Dirección de Edificios del Ministerio de Obras
Públicas (MOP) hasta el año de 1951. Junto con su colega Armando Fernández
Esté, fundan la Oficina Técnica Fortoul y Fernández, en donde participan en
destacados proyectos de ingeniería estructural, tales como la Aduana de
Maracaibo, los puentes del ferrocarril Puerto Cabello-Barquisimeto, el
helicoide de la Roca Tarpeya, entre muchos otros. Se integró como docente a la
Facultad de Ingeniería de la UCV desde el año 1955, alcanzando la categoría
máxima de Profesor Titular. Para beneplácito de la ingeniería nacional, se
mantuvo como docente durante 60 años.
Sus inquietudes sociales lo llevaron desde muy joven a
la política, dentro del partido Acción Democrática (AD) y a participar
activamente en la lucha contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, en la
década de los 50. Al caer Pérez Jiménez queda a cargo de la
dirección del Plan de Obras Municipales de la Gobernación del Distrito Federal,
lo que lo lleva a establecer una
relación tan estrecha con los barrios y su gente que es conocido como el
ingeniero del pueblo. Fue la protesta de la gente la que consiguió que lo
restituyeran en su cargo, luego de que había sido destituido por el nuevo
gobernador de la ciudad. En 1960 es parte del grupo de jóvenes que se separan de AD y fundan el
Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) junto a Domingo Alberto Rangel,
Moisés Moleiro y otros. Más tarde se desliga de la política y se concentra en
su labor académica.
Conocí a Celso Fortoul en 1968, durante mis estudios
de ingeniería civil, eran tiempos de estudio y reflexión, de la renovación
universitaria que resonaba en el planeta. Fue mi profesor en la asignatura
Estructuras, y me impresionó desde la primera clase, por su claridad
conceptual, su elocuencia y su sencillez, espiritual y material. Recuerdo una
ocasión en que las clases habían sido suspendidas por las autoridades, era la
turbulencia de la renovación; Fortoul respondió favorablemente a la solicitud
que le hicimos los estudiantes de dictar clase, y lo hizo, improvisamos un aula
fuera de las aulas cerradas, en un pasillo de la Facultad, y dictó su clase con
la sencilla elegancia del hombre sabio. Luego me tocó ser su preparador en la
asignatura Estática Aplicada, mi interacción con él me dejaron enseñanzas y
recuerdos imborrables.
Una de las principales contribuciones de Celso Fortoul
a la profesión y a la Academia, fue el desarrollo de los primeros programas de
cálculo computacional de estructuras, que fueron luego de uso generalizado en
el medio profesional del país. Los desarrolló, con base a una preparación
autodidacta, pues no tuvo la oportunidad de salir a especializarse en el
exterior a nivel de postgrado. La calidad de estos desarrollos propios competía
favorablemente con los programas desarrollados en las mejores universidades
foráneas, lo cual pude comprobar personalmente durante mi estadía en una de las
universidades más prestigiosas de USA, la Universidad de Berkeley.
Cuatro promociones de Ingenieros Civiles llevan su
nombre, las de los años 1962, 1972 y 1982 en la UCV, y la de 1962 en la USM. Le
fueron otorgadas varias condecoraciones: Orden 27 de junio en su segunda clase;
Orden José María Vargas en su Primera Clase, UCV.; Orden Francisco de Miranda
en su Segunda Clase; Orden Francisco de Miranda en su Primera Clase; Orden 18
de julio en su Segunda Clase, U.S.M.; Orden 18 de julio en su Primera Clase,
U.S.M.; Orden Andrés Bello en su Primera Clase. Le fue conferido el Doctorado
Honoris Causa de la UCV en el año 2011 y fue designado Miembro Honorario de la
Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat en el año 2012.
Celso Fortoul, el hombre de excepcional calidad humana
quien dedicó su vida a enseñar de manera intensa y generosa, el sabio profesor
que nos dio tantos ejemplos de vida, nos dejó un 03 de marzo de 2019, a los 92
años. Me considero privilegiado por haber tenido la fortuna de conocerlo.
Teresa Guevara Pérez (España, 01 de marzo de 2022)
A Celso Fortoul Padrón
Conocí a Celso personalmente por primera vez
en 1991 cuando preparaba con José Luis Alonso una ponencia para la Décima
conferencia mundial en ingeniería sísmica (10WCEE) que sería en Madrid en 1992.
JLA me invitó para que fuéramos a reunirnos con Celso en su casa de Prados del
Este y pedirle que nos asesorara en la utilización del programa “Set-Building”
desarrollado por él en Inmicro, Inc., para corroborar la hipótesis de que los
edificios con plantas en forma de H y L tenían un comportamiento inadecuado ante
la acción de fuerzas sísmicas. Su entusiasmo nos contagió y participó en la
versión final de dicha ponencia.
De ahí en adelante se estableció una relación
profesional entre Celso y yo que fue creciendo hacia una relación que
integraría a los miembros de mi familia nuclear, así como a los de la suya,
principalmente con Ligia, su esposa y maravillosa compañera, y a sus tres
hijas: Ligia, Bernardita y Nora. Cada vez que iba a visitarlo a su casa de
Prados del Este, bien fuera por consultas profesionales o por hacer un rato de
sociales, solíamos dedicarle aunque fuera un ratico, a ponernos al día de los
últimos acontecimientos familiares; luego seguiríamos con otros múltiples
asuntos, entre otros, como las clases particulares que me daba para explicarme
numéricamente los conceptos de diseño de edificios sismorresistentes que yo
iría transformando en gráficos bi- y tri- dimensionales y descripciones en un
lenguaje que pudiera llegar a los arquitectos, urbanistas e ingenieros no
especializados en el diseño de edificaciones sismorresistentes.
Con relación a estas conversaciones se le
presentó a Celso la posibilidad de rescatar la Maestría en Ingeniería
Estructural de la Universidad Simón Bolívar y se le ocurrió que desarrolláramos
un programa con un enfoque transdisplinario en donde pusiéramos a trabajar
equipos de estudiantes de diferentes profesiones (arquitectos, urbanistas,
ingenieros, geólogos, geofísicos, etc.) en proyectos que se acercaran a la
realidad y que permitieran reducir la vulnerabilidad sísmica de las ciudades.
Trabajamos durante seis meses para preparar los programas, seleccionar
asignaturas y profesores y reorganizar el material que había quedado del
antiguo Máster antes de cerrarlo. Lamentablemente no pudimos seguir por falta
de financiamiento.
Las reuniones en su gran sala multiusos eran
para mí un tesoro; sentados bien fuera en “su despacho” hablando de temas muy
importantes tanto profesionales como de lo que estaba ocurriendo en Venezuela y
el mundo, o haciéndonos la visita en la esquina de la sala en donde se abrían
las puertas corredizas hacia su jardín y Ligia colocaba en una mesita ricos
manjares y me mostraban las obras que ella iba realizando. Cuando estábamos en
“modo visita” se acercaban Ligia, Nora y los miembros de la familia de
Bernardita.
En el espacio interior estábamos rodeados
por: su extensa biblioteca sobre diferentes temas y su espacio para la música
con los últimos adelantos en equipos de sonido para cualquiera de los formatos
de audio en los que recogía su fantástica colección de música clásica,
especialmente de ópera y otros géneros. Cuando yo llegaba y le había llegado
una nueva adquisición se deleitaba explicándome de qué se trataba. Fueron unas
reuniones maravillosas que me
permitieron aprender y disfrutar del conocimiento inconmensurable de este
hombre maravilloso, genial, no sólo brillante y pionero en su
campo, sino una persona tan sencilla, generosa, amable y gentil… y con un gran
sentido del humor.
Para cerrar, quiero agradecerle inmensamente
a Celso el haber recomendado a Arnaldo Gutiérrez el contenido de mi libro
“Configuraciones urbanas contemporáneas en zonas sísmicas” basado en una
investigación que yo había desarrollado bajo la guía del Prof. Vitelmo Bertero
de UCBerkeley y que Celso con su generosidad había seguido cuidadosamente
durante 7 años dándome sus valiosos consejos. Gracias a Arnaldo fue posible la
financiación por parte de Sidetur de la publicación en 2012 de dicho libro.
El Museo de Arquitectura, agradece a OA López y a T Guevara, sus
valiosos testimonios que seguramente contribuirán a divulgar aspectos de la
trayectoria de este extraordinario ingeniero y de sus condiciones personales y
profesionales.
CCS, Musarq, 02 Marzo 2022
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